El cerdo puede cocinarse de muchas formas. Sin embargo, no todos los métodos de cocción contribuyen en la misma medida a nuestra alimentación equilibrada. Es frecuente el consumo de este tipo de carne en fritos o rebozados, opciones que incrementan su aporte calórico y que solo pueden incorporarse a nuestra dieta de manera ocasional.
Para cocinar con cerdo de forma saludable hay que seguir una serie de pautas y técnicas culinarias adecuadas. Repasamos a continuación 6 tips para que tus recetas de cerdo resulten sanas y nutritivas.
Los 6 consejos fundamentales para cocinar con cerdo de forma saludable
Selecciona cortes magros
Es de sobra conocido que del cerdo se aprovechan todas sus partes, pero a la hora de plantear una cocina saludable elige preferentemente los cortes del cerdo que tiene menos grasa y calorías. Por ejemplo, lomo, paleta, solomillo, chuletas y jamón magro. Evita cortes con mucho veteado y grasa visible. En el otro extremo, la panceta es de las partes más grasas, que deben consumirse siempre con moderación. Descubre cuáles son las partes más valoradas del cerdo y cómo prepararlas.
Escoge métodos de cocción ligeros: al horno o a la parrilla
Asar, hornear, hervir, cocer al vapor o cocinar en la parrilla son alternativas más saludables frente a las preparaciones fritas. Las frituras agregan una cantidad de calorías y grasas que resultan nocivas si se toman en exceso.
Al horno
Si cocinas el cerdo al horno, no exageres con el aceite, procura que la cocción sea lenta y no sobrepasar una temperatura de 180 ºC. Si sigues estas indicaciones potenciarás el sabor de la carne y la carne conservará un alto contenido en nutrientes.
A la parrilla
Si cocinas el cerdo a la plancha evita quemar o dorar la carne en exceso, para no perjudicar a su calidad. Una cocción intensa elimina vitaminas. Sin embargo, con el interior menos hecho se conservan.
Puedes optar por un adobo con ajo y especias, que aumenta su contenido en polifenoles y su poder antioxidante.
Prepara un marinado saludable
Marinar el cerdo con aceite, ajo, jengibre, hierbas frescas y aromáticas como el romero, jugo de cítricos (limón, lima, naranja, etc.), yogur bajo en grasa… añade sabor y potencia y respeta el de la carne sin necesidad de recurrir a salsas más pesadas que suponen grasas adicionales. Además, todos estas especias y condimentos mantienen la carne jugosa sin añadir calorías vacías.
Controla el tiempo de cocción
Tiempos de cocción excesivamente prolongados pueden hacer que la carne se reseque. Para controlar la temperatura interna de la carne lo mejor es utilizar un termómetro de sonda. Cuando alcance 60-62 ºC ya estará lista. Esta es una temperatura interna segura sin pasarse de cocinada.
Elimina el exceso de grasa
Como paso previo a la cocina del cerdo, retira el exceso de grasa visible para reducir la cantidad total de grasa en la preparación, así como su contenido calórico.
Acompañamientos saludables
De nada servirían estos consejos si después no cuidamos las guarniciones y acompañamientos en nuestras recetas de cerdo. Unos vegetales al vapor o asados, ensaladas frescas, etc. garantizan el equilibrio nutricional frente a otras opciones con alto contenido en grasas y calorías.
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