Cualquier receta de vacuno puede ganar muchos enteros si está bien acompañada por una guarnición bien escogida o una salsa que la complemente bien. En su mayoría, las personas amantes de la carne lo sienten así y así les gusta disfrutarla.
Es importante elegir bien las guarniciones o salsas para elaborar un plato de carne que pueda tener éxito entre tus clientes o invitados, ya que no todos los sabores ni los ingredientes combinan bien unos con otros. Y también es importante saber que la guarnición o la salsa debe tener un papel destacado pero siempre secundario. Por regla general, su extensión no debe ser mayor a un tercio del plato.
Para acompañar un entrecôte, un chuletón o un solomillo son clásicas las salsas de mostaza, barbacoa, a la pimienta verde o de queso roquefort o queso azul, entre otras. Asimismo, es tradicional acompañar estas preparaciones con patatas en múltiples versiones (fritas, al horno, en puré o ensalada), con arroz, tomates, diferentes ensaladas, verduras asadas, champiñones…
5 guarniciones ideales para la carne de vacuno
Para entendernos mejor, comenzaremos con una definición de “guarnición”. Se utiliza este término para referirse al acompañamiento del ingrediente principal dentro de un plato. La mayoría de las veces su función es la de aportar un sabor extra o un contraste con el de dicho ingrediente protagonista. Tampoco está exenta la guarnición, muchas veces, de una función ornamental o decorativa que contribuya a que el plato entre mejor por la vista.
Hemos seleccionado estas cinco guarniciones para acompañar a tu pieza de carne vacuna. Son solo unos ejemplos a partir de los cuales puedes encontrar inspiración para tus creaciones:
- Zanahorias asadas: combinan a la perfección con platos de ternera en salsa.
- Ensalada caprese: ensalada italiana ligera ideal para complementar un buen plato de chuletas, un chuletón o entrecôte. Se compone de rodajas de tomate, mozzarella fresca y hojitas de albahaca.
- Ensalada de pera en hojaldre con queso roquefort y nueces: una de las mejores aportaciones de sabor y estética que se pueden hacer a la carne de vacuno. Combinación perfecta.
- Compota de manzana: otro complemento perfecto para recetas de carne asada que ayuda a reducir el aporte calórico del conjunto. También puedes saltear las manzanas en gajos con mantequilla e incluso confitarlas.
- Ensalada de pimientos asados: aliñados con aceite de oliva virgen extra, vinagre y ajo. Esta es una guarnición ideal para una barbacoa.
5 salsas perfectas para tu guiso de vacuno
Si acudimos a la definición de “salsa” encontramos algo así como que es una mezcla de alimentos triturados o desleídos que se utiliza para aderezar o condimentar la comida. Sirve de complemento al ingrediente principal, su papel de secundario de lujo es similar al que hemos explicado para el caso de las guarniciones: realza sabores, aporta otros nuevos y/o sirve de acompañamiento visual.
Hemos seleccionado cinco salsas que combinan a la perfección con tu preparación de vacuno. Como en los ejemplos anteriores, son solo ejemplos para inspirarte:
- Salsa al vino: reducir al fuego el vino con un poco de azúcar para conseguir una reducción o una salsa de vino caramelizada. El sabor de la vaca o el buey combina perfectamente con el sabor dulce y poderoso de esta salsa.
- Salsa chimichurri: a base de ajo, cebollinos, pimiento picante, perejil y orégano, con aceite, limón y vinagre, muy popular en Argentina. Va muy bien con carnes rojas sabrosas cocinadas a la brasa.
- Salsa de frutos secos: elaborada con nueces, avellanas y almendras trituradas y un caldo de carne casero.
- Salsa de Pedro Ximénez y pimienta: con cebolla, nata para cocinar, pimienta, uvas pasas moscatel y Pedro Ximénez.
- Salsa de foie: esta salsa matiza con personalidad el sabor de un buen solomillo. Se prepara con un sofrito de cebolla, trocitos de foie y una reducción del Pedro Ximénez.
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