¿Preparas tus cócteles con el punto óptimo de sabor y aroma? Si tienes dudas, quizá es que no prestas la suficiente atención a las posibilidades de los botánicos o aromatizantes. Sabrás que, de un tiempo a esta parte, ha cobrado vigencia su uso en el mundo de la coctelería; seguramente, utilizas o te suenan el anís estrellado, las bayas de enebro o el cardamomo y otras especias, pero… ¿conoces la verdadera importancia que tienen en la preparación de un combinado? ¿Sabes cómo utilizarlas correctamente?
Aprender a dar el toque diferencial a tus copas, con tu propia personalidad, no es tarea fácil. Influyen diversos factores. La utilización de los botánicos es solo un aspecto de los muchos que hay que cuidar en la preparación coctelera, pero en ningún caso se puede dejar de lado si queremos aromatizar debidamente nuestras bebidas. Has de saber que hay multitud de ellos y que cada botánico puede hacer de tu copa una experiencia diferente.
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¿Qué son los botánicos y para qué se utilizan?
Los botánicos son esas especias que se utilizan para darle aroma al cóctel, potenciar su sabor y aportarle un punto de color, de estética y mayor atractivo. Permiten darle un toque distinto y crear una sensación diferente.
Aunque se usan desde hace mucho tiempo, no eran demasiado frecuentes en nuestras coctelerías hasta hace unos años. Hoy en día, es habitual añadirlos a los cócteles, siempre bajo unas normas básicas que permitan un resultado absolutamente equilibrado.
¿Cómo se usan?
Como norma general, como máximo, se aconseja utilizar dos botánicos diferentes por copa, además de un cítrico fresco, de forma opcional, si lo consideramos necesario para nuestro combinado.
En caso de que se quiera incorporar más botánicos, se recomienda recurrir a otras técnicas como, por ejemplo, el majado y el infusionado.
- Majado: técnica a través de la cual se machaca o tritura la especia.
- Infusionado: consiste en extraer el sabor de la especia mediante su disolución en un líquido caliente.
En el caso de los botánicos deshidratados o liofilizados (extractos secos naturales a los que se ha desprovisto de todo su componente líquido), lo más recomendable es aplastarlos ligeramente antes de incorporarlos a la preparación. De esta forma conseguiremos que consigan desprender todo su aroma en beneficio de nuestro cóctel. Vueltos a hidratar, recuperan su forma original y liberan todo su sabor.
Si lo que necesitas es extraer ese color, sabor y aroma lo más rápidamente posible, vas a tener que recurrir a la técnica del infusionado, especialmente con botánicos como el jengibre o la regaliz. Para ello, basta con calentar el alcohol de base junto con la especia antes de introducir los hielos en la copa.
10 de los botánicos más utilizados en coctelería
Anís estrellado: una especia originaria del suroeste de China, que combina a la perfección con la ginebra, también con vodka y vermut, y destaca por su aroma a anís y por su gran vistosidad.
Bayas de enebro: se utiliza sobre todo para potenciar el sabor de la ginebra y aportar un sabor muy refrescante.
Cardamomo: original del sur de la India y Sri Lanka, ligeramente picante aunque con un toque dulce y un aroma exótico. También se utiliza mucho con ginebra, ya sea seca o especiada. Esta especia se puede utilizar majada o infusionada.
Regaliz: procedente del Mediterráneo europeo y Asia Menor, combina de forma deliciosa con ginebras, vermuts y determinados tipos de vodka. Se suele utilizar infusionada durante un largo rato.
Pimienta de Jamaica: proviene del sur de México, Guatemala, Jamaica y Cuba. Esta especia aromática aúna toques de canela, nuez moscada, clavo, enebro y pimienta, dando lugar a un aroma único. Combina con ginebra, rones especiados, cócteles caribeños… su uso permite la técnica del majado y de la infusión.
Flor de hibisco: aporta un aroma intenso a flor, que se potencia una vez se ha infusionado con la bebida alcohólica. Puede disfrutarse con ron blanco, vodka o ginebra, es un botánico muy habitual en los mojitos.
Vainilla Bourbon: original de Madagascar, aporta un aroma a vainilla en combinación con otros florales y frutales. Perfecta combinación con ginebra, ron dulce, vodka y vermut.
Jengibre: sabor picante y levemente amargo que combina con ginebra, ron, vodka, brandy… Su raíz deshidratada proporciona estos ricos matices aromáticos. Se utiliza dejando en maceración un par de trozos. Una vez que se ha infusionado se puede dejar una rodajita en la copa para hacer perdurar su aroma.
Flor de Azahar: ofrece una aroma que recuerda ligeramente al del cítrico, más suave, con un toque a miel y un fuerte aroma floral. Su uso es frecuente con ginebra. Se usa infusionando un pellizco en el alcohol, a temperatura ambiente, tan solo dos minutos antes de incorporar el hielo. Puede colarse o no, según se prefiera.
Canela Cassia: parecida a la canela común, aunque esta se encuentra en la corteza de un árbol de Chuna e Indochina, y es menos dulce; tiene un punto incluso picante. Combina con ginebra, ron, vodka, vermut… Para disfrutar de su fuerte aporte aromático, basta con echar una ramita en el combinado. También se puede rallar sobre la copa antes de servirla.