No hay como el aroma del café recién hecho, cuando el olor de la cafetera invade la estancia en la que estemos. O del grano de café recién molido, una fragancia suave que entra por la nariz y reconforta, porque el café para muchos huele a hogar.
Y quizás es por esta razón, y porque una taza de café significa el cierre de un buen rato sentados a la mesa, que esta bebida cobra cada vez más importancia. A más personas nos preocupa tomarnos una taza de café de calidad si estamos en un restaurante. Y esa afición la estamos trasladando a casa. Pero ¿qué necesitamos para preparar una buena taza de café en nuestra cocina cual baristas?
Utensilios para preparar un buen café
Los amantes del café han querido emular las preparaciones que toman en sus cafeterías preferidas al comprobar que no es necesario poseer una maquinaria de lujo para lograrlo. Se trata simplemente de tomar en cuenta algunos principios que sí son básicos:
- El primer paso es elegir un buen café. El 80% del café consumido en el mundo es de la variedad arábica. Un café de gusto más suave que la variedad robusta. Los blend son la mezcla en distintas proporciones de granos de diferentes orígenes. Toma en cuenta la fecha de tueste, que no hayan pasado meses porque habrá perdido calidad. No obstante, la elección del café es algo muy personal, depende del gusto de cada uno, pero siempre cuidando que sus granos hayan tenido un proceso óptimo de trazabilidad desde su plantación hasta su envasado.
- Compra el café siempre en grano una vez elijas el que más te guste, tal y como aconseja Harry Neira, CEO de Neira Café Lab y profesor de Scoolinary, te asegurarás la frescura necesaria para conseguir el mejor sabor y aroma en cada taza. Toma en cuenta que cuanto más gruesa sea la molienda más largo debe ser el proceso de infusión. La molienda que suele aconsejarse es media para obtener un café perfecto.
- Lógicamente, debes contar con un molino de café en casa. Los hay de distintos precios para cada bolsillo.
- Otra herramienta fundamental es la balanza. Para obtener un café perfecto es necesario tener un control preciso de las cantidades de café y agua, no se puede hacer a ojo.
- En cuanto a la máquina que emplees para hacer tu café, nuevamente entra el gusto personal. Existe una maquinaria diversa para esto, es solo elegir la que prefieras, algunas son:
- Moka italiana. Uno de los métodos más populares. Debe usarse agua caliente siempre, “el agua caliente ayuda a que suba de una manera más rápida y los vapores no tarden tanto… y se gana calidad sensorial en la bebida” señala Neira. El café que genera es denso y con cuerpo.
- Chemex. Es una máquina inventada en 1941. El café se hace por goteo de forma manual. Produce una bebida ligera, de gusto delicado, sin notas amargas.
- Prensa francesa. Otro de los métodos más populares que hay para hacer café por lo fácil que resulta emplearlo. Se obtiene una bebida por un proceso de inmersión y es importante que sirvas y consumas todo el café prensado, si vas a dejar una parte, cámbialo de recipiente.
- Hario V60. Es un método de filtrado que produce un café con mucho cuerpo. Se emplea un filtro de algodón y el café resultante es cristalino.
- Por último hay que elegir el recipiente donde servirás el café. Cada preparación tiene el material y tamaño adecuado. Si quieres mantener el calor elige un envase de loza o porcelana y si lo prefieres menos caliente opta por uno de cristal. Lo importante es que el recipiente tenga una pequeña base curva que asegure una mejor presentación y un mejor resultado final.
Aprender a hacer un café como un profesional del gremio es posible. Para adquirir todo el conocimiento que necesitas puedes realizar el curso de Scoolinary, El mundo del café, con Harry Neira. Aprenderás métodos, todo sobre maquinaria y utensilios y otros detalles de este fascinante mundo.