Como se suele decir, cocinar con tofu es fácil… si sabes cómo hacerlo. No, en serio, es fácil de verdad. Además, es susceptible de cocinarse de prácticamente cualquier manera; esto, unido a su fácil maridaje con numerosos ingredientes, nos da una baza ganadora para añadir nuevos platos a nuestro repertorio.
Si echas un ojo al Curso de Brunch Vegano de Marika Netzel, lo comprobarás; esta chef polaca asentada en Berlín lo utiliza en cuatro elaboraciones distintas (un falso queso feta, una ensalada alemana de repollo y “huevo”, unos panqueques y un revuelto) y con tres técnicas también diferentes.
¿Qué es el tofu?
No es fácil resumir una tradición astronómica milenaria en tres párrafos, pero vamos allá. Se trata de un alimento que se elabora coagulando leche de soja (granos de soja remojados, molidos y filtrados) y prensando el resultado. De origen chino, tiene una enorme implantación en Asia oriental y una difusión de rango global.
Como buena legumbre, el tofu es rico en proteínas para ser un vegetal; también es bajo en grasas y calorías, y puede contener altos niveles de minerales. Y como no contiene ningún elemento de origen animal y tiene un sabor bastante neutro, es un elemento muy habitual en la cocina vegetariana y vegana.
Aunque existen diversos tipos de tofu (como el tofu fresco sin cortar o sedoso sin prensar; no confundir con otras cosas se parecen pero no son tofu, como el seitán o el tempeh), daremos por supuesto que vamos a cocinar con tofu firme, que es el más fácil de encontrar, versátil y con una textura de tipo medio.
Cocinar con tofu: 5 técnicas
También vamos a suponer que vas a adquirir el tofu ya elaborado (si quieres hacer tu propio tofu, empieza por aquí). Siendo así, ¡aquí van cinco maneras de cocinarlo e incorporarlo a tu repertorio de ingredientes!
En crudo
La forma más intuitiva de pensar en el tofu es imaginarlo como un queso, y la forma más intuitiva de comer queso es en crudo (o sea, sin más elaboración). También a la hora de cocinarlo puedes pensar en él como una especie de queso fresco tipo mozzarella o feta.
Ya sabemos que te hemos dicho que hablaremos de tofu firme, pero si en este caso tienes tofu tierno, mejor. Si es así, te recomendamos muy mucho que no lo prenses, pero sí que lo escurras bien y lo trocees, sea en tacos, sea desmenuzado, para integrarlo en una ensalada.
Salteado o sofrito
Entender el tofu como huevo cocinado es una opción alternativa que amplía mucho nuestras posibilidades, tanto en elaboraciones frías (ensaladas a la alemana con repollo y mayonesa, por ejemplo) como calientes (para el relleno de unos rollitos de primavera veganos, por ejemplo).
Otra forma muy habitual de cocinar con tofu es desmenuzarlo a mano y sofreírlo en una sartén para hacer un sofrito de base. Es el caso, se nos ocurre, de la receta de Scoolinary del chili de tofu.
Marinado
Marinar o encurtir el tofu es un recurso clásico (y no siempre eficaz). Normalmente en forma de rebanada o filete, el tofu marinado nos aporta toques aromáticos diferenciados (y a nuestro gusto) para usarlo en muchas otras elaboraciones.
Hay dos formas: partiendo del tofu “crudo”, curándolo con una mezcla potente y tibia durante al menos 24 horas (mejores resultados con 72 horas); o tras un cocinado en caliente (una pasada en la sartén) para crear una “costra” que absorberá más fácilmente los sabores.
Guisado
Una vez te das cuenta de que se puede guisar en salsa como cualquier carne o pescado, cocinar con tofu se vuelve mucho más sencillo que nunca, porque sabrás cómo emplearlo para sustituir la proteína en cualquier guiso que hagas.
La única cosa a tener en cuenta es que el tofu demasiado blando corre el riesgo de deshacerse (no es grave, pero el aspecto será regulero), y que si es demasiado firme, como ya está digamos “cocinado”, puede volverse algo gomoso.
Frito
Freír el tofu en tacos (en especial el más firme; sí, llegamos al otro extremo de la gama) es una de las maneras más agradecidas de consumirlo, porque se enriquece en sabor si utilizas un buen AOVE (¡hazlo!) e incorpora una cobertura que aporta crujiente.
O, todavía mejor, hazlo rebozado y frito en una fritura profunda. Elige el formato (tacos, tiras o rebanadas) y el estilo de rebozado que prefieras; no te olvides de sazonar antes. Perfecto para un picoteo con alguna salsa para dipear o como guarnición.
Experimenta con nuevas técnicas e ingredientes
Lleva el Curso de Brunch Vegano de Marika Netzel a otro nivel combinándolo con estos otros cursos Scoolinary de cocina vegana y vegetariana:
- Curso de Cocina Vegana con Proteína Vegetal de Nicolás Tomaselli
- Curso de Cocina Vegetariana de Marcelino Jiménez y Julia Kleist
- Curso de Recetas con Proteína Vegetal de Lucas Lindenberg
