Las texturas son un gran aliado para dar personalidad a un plato y ser original. Precisamente suena paradójico que algo que ya existe pueda dar originalidad a un plato. Pues bien, el uso de gelificantes en alimentos pueden darle un vuelco a tu plato.
Muchos conocemos los gelificantes tradicionales como el aspic (a menudo presentado en láminas), pero con los años los avances científicos en campo de la gastronomía, han logrado que tengamos al alcance de la mano múltiples opciones que nos permiten gelificar productos en función de su naturaleza y nuestros objetivos, para obtener siempre el mejor resultado en textura y sabor. Algunos de ellos son el agar-agar, la iota, el gellan o el gel de leche. Cada uno tiene sus propiedades, por lo que nos convendrá usar un gelificante u otro en función de los productos a los que lo apliquemos. Esto se debe a que el resultado deriva directamente de la interacción química de los componentes en la mezcla, por lo tanto, es recomendable conocer bien la naturaleza de los productos para saber como aplicar los gelificantes.
En Creative Signatures muy pronto presentaremos un chef especializado en el mundo de las texturas para que nos enseñe como utilizar estos productos y aprenderemos a crear maravillas, como el café que podemos ver en la fotografía.
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