Su sabor, ternura y la variedad que ofrece en sus cortes son tres de los elementos que hacen que la carne de cerdo nunca pase de moda. No hace falta recordar que en España existe una arraigada tradición gastronómica en torno a este animal.
Si quieres descubrir todas las posibilidades que ofrece la carne de cerdo en cocina, Andreu Genestra, propietario y chef de su propio restaurante, reconocido con 1 estrella Michelin y 2 soles Repsol, te propone un curso online fascinante: Cocina con Carne de Cerdo. Este apasionado de la perfección y de la alta gastronomía te guiará para que puedas aprender diferentes técnicas a través de una buena variedad de recetas: tartar de tocino ibérico, snack de chicharrones, lengua con alcaparras, canelón de caldo de cochinillo, etc. Al final del curso estarás en condiciones de deshuesar, conocer el despiece, diferenciar y cocinar con solvencia las partes más reconocibles del cerdo. ¿Te atreves?
7 recetas con carne de cerdo muy apetecibles para servir en Navidad
Lomo de cerdo con salsa de frutas
El lomo de cerdo es un recurso muy útil en la cocina, ya que resulta económico y no demasiado abundante en grasa. El secreto en la preparación de este plato estará en la salsa o la guarnición, que puede prepararse con manzanas, peras, orejones, uvas pasas, mandarinas, dulce de membrillo… Una receta para mojar pan. Sin duda, puede funcionar muy bien dentro del menú navideño.
Presa ibérica al vino con frutos rojos
Una combinación de sabores irresistible. La carne de cerdo marida a la perfección con los sabores dulces. Además, es una receta muy sencilla de preparar. Bastará con unas presas de cerdo ibérico, una botella de vino tinto, frutos rojos en cantidad y cucharadas de azúcar. Todo proporcional al número de comensales. Para la guarnición, vendrán de lujo unas patatas aderezadas con romero y perejil fresco.
Lomo de cerdo relleno de verduras
Otra receta económica, muy resultona y de alto nivel. Recuerda pedir al carnicero que te prepare la carne para rellenarla. Y recuerda también que, aunque pueda parecer laborioso, el trabajo final lo realiza el horno. Puede utilizar para el relleno cebollas, puerro, champiñones, espinacas… Acompáñalo con una salsa barbacoa con miel o con un puré de verduras gratinado. ¡No falla!
Solomillo de cerdo con habitas
Si lo que vas buscando es una receta más ligera, pero que contenga todo el sabor y jugosidad del cerdo, este es tu plato. Acompaña el solomillo con unas habitas frescas en su vaina y completa el conjunto con una apetitosa ensalada de lechugas variadas como guarnición. Si el resto del menú contiene otros platos contundentes, esta puede ser una buena opción.
Lomo de cerdo a la naranja
¿Te gusta el sabor a naranja? Esta es una receta muy sencilla, rica en nutrientes y económica. El cerdo es el ingrediente principal que funciona como base. Se completa con zumo de naranja y ralladura de esta fruta, aparte de aceite de oliva, cebolla, ajos, pimientos rojos, vino blanco y sal y especias al gusto. Un éxito seguro en tu mesa navideña, gracias al exquisito contraste de sabores.
Pinchos de secreto ibérico al caramelo
En esta receta la carne adquiere un toque dulzón muy atractivo completado por el crujiente que aporta el caramelo. Solo necesitas la pieza de secreto ibérico, azúcar y sal. No está pensado como plato principal, sino más bien para un bocado de aperitivo. Un entrante de alta categoría, muy sabroso.
Solomillo de cerdo con salsa de cerezas
Como ya sabes, el cerdo y las frutas se llevan de maravilla en la cocina. Pero la combinación con las cerezas es realmente especial. No es un plato demasiado trillado y resulta de lo más elegante, por lo que puede ser un fuerte candidato para encabezar la comida o cena de cualquier día importante de las Navidades. Para esta receta se emplea naranja, limón, miel, un poco de whisky y pimienta, aparte de las cerezas. Lo primero que tendremos que hacer es marinar la carne durante unas horas con el zumo de naranja, medio limón, algo de miel y agua. Por otro lado, preparar la salsa con más zumo de naranja, el otro medio limón, otro chorrito de whisky y otro poquito de miel. ¡Delicioso!
