Hacer fotos atractivas de los platos que creamos o de lo que nos comemos es indiscutible: si queremos generar interés en las redes sociales y demás canales que usemos para comunicar, las imágenes deben transmitir lo apetecible de la comida en un marco atractivo.
En este proceso, quizás la mayoría de las veces fotografiamos en espacios interiores que no cuentan con una luz eficiente para el objetivo de nuestra cámara. Entonces te enfrentas al reto de hacer fotos de comida con poca luz. En este post queremos contarte algunos trucos para hacer fotos bonitas cuando estás en un entorno escaso de iluminación.
5 consejos para hacer fotos con poca luz
- Aprende a aprovechar tu fuente de luz
Jimena Agois es fotógrafa especializada en gastronomía y profesora de Scoolinary. Lo primero que ella recomienda es sacarle partido a la luz con la que contemos a la hora de fotografiar.
Básicamente existen dos tipos de luz, la natural y la artificial. Lo importante es saber dónde colocar la fuente de luz respecto al plato/sujeto a fotografiar. Si tenemos claro este punto, luego se pueden emplear otros recursos para compensar
- Cuando la luz está detrás del plato tenemos un backligth. Esto puede hacer que el elemento quede en sombra.
- Si la luz llega por un lado del plato es luz lateral. Esta tiene la ventaja de generar sombras y volúmenes en el plato que pueden quedar muy bien.
- Si la luz está justo donde nos encontramos nosotros con la cámara es luz frontal. Esta ilumina el elemento a fotografiar pero puede tener el inconveniente de minimizar las sombras y los volúmenes, aplanando el plato.
2. Emplea rebotadores y difusores
Los rebotadores se usan para compensar el desbalance de luz en la composición que queremos fotografiar. Los difusores, por su parte, los empleamos para suavizar la luz con la que contamos si esta es muy dura.
Si fotografiamos una hamburguesa, por ejemplo, y la luz está justo detrás, quedará completamente en sombra o semisombra. Así, la solución es alternar esa luz con un rebotador colocado frente a la hamburguesa para que se refleje la luz e iluminar la parte frontal.
En los casos de luz lateral, si la fuente de luz está muy cerca de la hamburguesa, las sombras serán más duras, si la alejamos, se suavizará. Si pones el rebotador en el lado opuesto a la fuente de luz eliminarás del todo o casi del todo las sombras.
Al respecto, Agois señala que “yo siempre empiezo con la luz lateral… Luego muevan el plato, prueben cómo se ven los volúmenes”. La idea es destacar las formas y las texturas si es una hamburguesa para que se aprecie su jugosidad. Si empleas luz frontal o flash, esto se elimina.
3. Si usas flash que sea con difusor
El problema de emplear flash al fotografiar comida es que es una luz dura que llega de frente. Si le colocas un difusor delante, suavizarás la luz y obtendrás unas texturas mucho más apetecibles. Puedes adquirir un flash portable para poner sobre un trípode o base fija, con esto obtendrás una iluminación parecida a la natural que entra por una ventana. Otra opción es una luz led con un difusor.
Tanto los difusores como los rebotadores son elementos que ofrecen precios muy económicos. También tienes la opción de emplear recursos caseros como una cartulina blanca y papel plata en el caso de los rebotadores, o hacerte un difusor con un cartón y papel seda.
4. Añade luz en la edición posterior
Y si el resultado final no te convence por la escasez de luz, también tienes el recurso de editar la foto una vez hecha. Puedes añadir más luz, suavizar sombras duras, editar puntos específicos de la imagen, etc.
La herramienta más común para estas tareas es Photoshop, pero si no eres fotógrafo y no sabes cómo emplearla, tienes muchísimas aplicaciones para tu smartphone que son sencillas de usar y que ofrecen recursos parecidos a la popular herramienta de Adobe.
5. Un último consejo…
Existen otros recursos para sacar fotografías con poca luz que tienen que ver con los ajustes que puedes hacerle a tu cámara réflex o bridge: cambiar los valores en el triángulo de exposición (diafragma, velocidad y sensibilidad ISO) o usar estabilizadores. En el curso Fotografía Gastronómica, con Jimena Agois, puedes aprender todo lo que necesitas para que tus imágenes gastronómicas sean las mejores.